domingo, 24 de enero de 2016

Otra visión más de la Escuela Infantil, mi experiencia.

Hellooooooooo friends !

Hoy os cuento mi segunda toma de contacto con los pequeños en la Escuela Infantil, de la que saco también aprendizajes positivos para mi, en este caso, lo que no hay que hacer.
Sinceramente la otra vez, me sentí mucho mejor, no por los niños porque ellos son encantadores todos, pero las educadoras son diferentes y cada una tiene una forma de ser también diferente.

Estuve el día 20, Miércoles. 
Pues bien, llegamos sobre las 10 y algo a la Esuela, y allí nos repartieron en diferentes clases, la mía fué de 2 a 3 años. Ellos estaban sentaditos en las colchonetas mientras la seño le explicaba lo que significaba "encima y debajo" ,me sorprendió porque con esa edad tan tempranita lo sabían diferenciar bien.

Poco tiempo después, como el patio estaba mojado de la lluvia no pudimos salir, pero la seño indicó que nos íbamos al salón de la tele, cuando se me acercaron dos pequeñas a cojerme de la mano para que las acompañara... Parecía increíble, me sentí como si ellos supieran cómo me sentía, y pretendieran integrarme con normalidad. 

Casi toda la mañana estuvimos en el salón te la tele, y en clase que volvimos a jugar a diferentes juegos, yo me incorporé en sus colchonetas para jugar con ellos y aquello fué un desastre, pretendían todos darme de comer con instrumentos de juego de la cocina , peinarme, que los abrazara ... jajajajajajajaja. 
Pude observar como lo que he aprendido en clase se da en la realidad, repetían todo lo que la seño decía, y eran súper obedientes, empezaban a controlar los esfínteres, a pedir por favor y gracias, a comer solitos, a compartir aunque unos más que otros, y recogieron todas sus cosas cada vez que la sacaban sin poner impedimentos y a la vez cantando la canción del orden .

Obviamente ví muchas cosas negativas, que me las reservaré para aprender de ellas. Lo que si me quedó muy claro que a ellos aunque finjas no le engañas y saben como eres, y si no tienen contacto contigo de tan pequeños, preocúpate.


                                                  Atte: Pisipís.

2 comentarios:

  1. Buenas lecciones, aunque la lección de diplomacia la ha dado Pisipís... Engañar a los menores no es un buen negocio, son más perspicaces de lo que creemos y si no lo son, tarde o temprano se darán cuanta del engaño, son pequeños no tontos... Si se dan cuenta de que se les engaña, no confiarán en esa persona, así que como educadores tratad de no engañarles, puede ser útil a corto plazo, pero a largo plazo podéis perder su confianza.
    Respecto a la socialización, es evidente que es bueno a esa edad, ya a los 2-3 empiezan a desarrollar la empatía.
    Por supuesto, rutinas o todo lo que les pongamos al alcance lo asimilan con una velocidad de vértigo, y no hablemos de imitar..., la de veces que hemos dicho que vais a ser unos modelos a seguir...
    Buen comentario Pisipís, como de costumbre no decepcionan tus entradas.

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